Cómo librar bien una conversación incómoda con su jefe, según expertos

Si está pensando plantearle una situación incómoda a su jefe, será mejor que revise estos consejos para no entrar en pánico al hacerlo.

Uno de los miedos más comunes en el entorno laboral consiste en mantener una conversación con el jefe, no necesariamente porque este sea desconsiderado o poco empático, sino porque aterra el hecho de hacer ciertas peticiones, pues no se quiere proyectar una imagen errónea que haga que un superior piense mal de nosotros. Por lo cual, le traemos algunos consejos para librar bien una conversación incómoda con su jefe.

Para empezar, es importante que reconozca que la mejor manera de obtener las recompensas, beneficios, cambios o facilidades que requiere es comunicándolas, pues su jefe no es adivino, por lo cual, el primer paso es decidirse a pactar un encuentro con su superior, siempre buscando el momento adecuado para ello, sin caer en la eterna posposición. 

Al respecto, Beatriz Ramiro, coach personal y experta en inteligencia emocional, afirmó para Vogue España que es necesario ser muy observador para lograr encontrar el momento ideal para solicitar el encuentro con su jefe, siempre tratando de proyectar una imagen tranquila y amable.

Además, la coach refiere que hay que tener un control sobre el lenguaje corporal, ya que este puede ayudar a demostrar seguridad o bien, tornarse débil, cuestión que podría provocar que un jefe no tome en serio su petición de audiencia. En este sentido también es importante hablar fuerte y claro, no al grado de gritar, pero sí dejando en claro que sabe lo que quiere y cómo requerirlo.

De igual manera, es útil visualizarse en la escena, ya que esto le ayudará a calmar los nervios una vez que esta se materialice, incluso si no sucede tal y como la imaginó, pues al final del día hay cientos de elementos que usted no puede controlar. En cambio, sus emociones son algo que sí puede gestionar, así que lo mejor es que practique sobre la manera en la que lo haría en diferentes situaciones.

Ramírez también destaca que es preciso ver cuál es el ánimo de su jefe y tomar en cuenta cómo es su relación con usted, ya que con esto se puede adoptar una postura que empatice con la de su superior, creando una sintonía comunicativa que puede ser muy útil para sus objetivos.

Es de suma importancia ser sinceros y elegir las palabras adecuadas una vez que se ha decidido a hablar de un tema delicado con su jefe; estando además abierto a la posibilidad de no obtener una respuesta favorable, pues nunca se puede predecir el resultado que se logrará, aunque si muestra una actitud firme y segura, tiene más posibilidades de tener un cierre satisfactorio.